Estamos en otoño y pensar en la preparación de cremas calientes para la comida o la cena nos hace sentir, especialmente, el abrigo del hogar. Este tipo de platos son de lo más reconfortantes cuando llega el frío. Servirlos en bonitos cuencos, que además nos permitan calentar nuestras manos mientras los tomamos, es símbolo de interior, calor, bienestar. Es, quizás, el plato que más se identifica con los sentimientos positivos que nos genera nuestro hogar.
Entre la inmensa variedad de cremas que podéis preparar, The Home Academy os trae hoy una receta otoñal: Crema de Calabaza. La calabaza abunda ahora en los mercados y su color y sabor dulce siempre dan un toque sugerente a cualquier menú.
Podemos acompañar esta crema con semillas, daditos de frutas de temporada, frutos secos, galletas de queso parmesano o pan frito. Si tenéis una sopera de esas que de tan bonita que es casi ni la usáis, no dudéis en utilizarla para presentar en ella vuestra crema, así disfrutaréis también del momento de servirla. Bon appétit!