Limpiar ventanas es uno de los clásicos de la limpieza de primavera. Aunque parezca un mundo, es sencillo si sabemos organizarnos. Con nuestros consejos conseguiréis unos cristales transparentes y brillantes.
Según donde esté situada vuestra casa, las ventanas presentarán diferentes tipos de suciedad. En las ciudades, esta suciedad será más grasa, producida por la polución. En cambio, si vivís en el campo, consistirá en polvo, polen, etc,…
Pero, ¿cómo acometer esta limpieza de forma eficaz? Estos son nuestros consejos:
1. Reservad en vuestra agenda la fecha idónea en la que haréis esta tarea y entre cuántas personas la realizaréis. Mirad antes la previsión del tiempo, ya que es mejor limpiar las ventanas en días claros sin riesgo de lluvia o viento.
2. Preparad todo lo necesario: barreño, estropajo, paños, productos de limpiacristales y bayeta especial para limpiar cristales.
3. Comenzad limpiando la ventana desde dentro hacia fuera, primero el marco, después los cristales.
4. Según la suciedad, limpiad primero con agua jabonosa y aclarad bien, después aplicad limpiador de cristales y secad con la bayeta especial.
5. Una vez que hayáis terminado, limpiad los útiles y guardadlos ordenados en su lugar correspondiente.
Por último, si tenéis niños, habréis comprobado que les encanta tocar los cristales, limpiadlos alguna vez con ellos para que aprendan a colaborar jugando.