Cómo hacer un huevo poché
Hacer un huevo poché es algo muy sencillo. Su nombre en francés significa “escalfado” y la diferencia con nuestros huevos escalfados de toda la vida es que podemos perfumarlos. Elaborar huevos escalfados, tal y como los hacemos en la cocina española, consiste en poner el huevo crudo, sin cáscara, en una cazuela con abundante agua hirviendo y un poco de vinagre para que coagule más rápidamente. En cambio, el huevo poché lo elaboramos poniendo el huevo crudo encima de un film transparente y cerrándolo a modo de saquito. Al hacerlo así lo podemos aromatizar con aceite, pimentón, trufa, albahaca, orégano, romero o cualquier otra especia que os guste.
Los huevos poché son estupendos para tomar como desayuno, como una cena ligera o como complemento de un buen brunch. Por ejemplo, sería una buena idea poder prepararlos en los desayunos de fin de semana y disfrutar de ese momento relajadamente para comenzar el día de la mejor manera. Si los preparáis para la cena, también es una maravillosa opción, ya que en tan sólo unos minutos podéis elaborar un plato ligero pero con muchas cualidades nutricionales.
Cómo animar a los niños a comer verduras
Todos conocemos la importancia de las verduras en nuestra alimentación diaria. Su aporte de vitaminas, minerales y fibra les convierte en un grupo de alimentos imprescindible para nuestra salud. Sin embargo, en muchas ocasiones son alimentos rechazados por los niños. ¿Cómo podemos hacer que las verduras resulten atractivas y apetecibles a los más pequeños de la casa?. Si tenéis hijos, el primer paso para que les gusten las verduras es que vean que vosotros las tomáis con frecuencia y con agrado. Los niños son verdaderos imitadores, pero también auténticos detectores de las cosas verdaderas, por lo que fingir delante de ellos no servirá de mucho. Si ven que sus padres toman verdura lo asumirán como algo bueno y normal que tratarán de imitar.